La responsabilidad social corporativa o RSC surge por la necesidad de la sociedad, de que las empresas cumplan con ciertos estándares sociales y ambientales no solo beneficios económicos.

En esta entrada explicaremos qué es la responsabilidad social corporativa (RSC), qué principios la rigen y que beneficios como empresa nos puede aportar.

¿Qué es la RSC?

La responsabilidad social corporativa es el compromiso ético y voluntario que adopta una entidad para realizar su actividad de manera sostenible, midiendo el impacto que sus acciones tienen sobre su entorno tanto interno como externo.

La RSC forma parte la reputación corporativa de una empresa además de como guía para llevar a cabo su cumplimiento normativo y evitar así la responsabilidad penal de las personas jurídicas en la que se pueden ver envuelta cuando alguno de sus miembros es denunciado por malas prácticas.

Por lo tanto, la RSC es una herramienta que sirve para reducir el impacto negativo de las empresas, sobre los derechos sociales, laborales, mediambientales en definitiva, sobre los Derechos Humanos.  

Principios

La gestión de la Responsabilidad Social Corporativa está basada en principios propios. Te nombramos algunos de los más relevantes.

1. Transparencia

Las compañías deben contar con políticas de transparencia empresarial a través de las cuales ofrezcan una información clara, lenguaje comprensible y formatos accesibles a todos sus empleados, directivos, accionistas, etc.

2. Normativas

Las empresas deben respetar las normas internacionales de comportamiento respecto de la responsabilidad social. Si se producen conflictos entre normas nacionales e internacionales, se debe intentar tomar acciones que permitan el mayor respeto de ambas.

3. Seguimiento

Las empresas deben implementar indicadores que le permitan autoevaluarse para obtener datos, detectar áreas de oportunidad y medidas correctivas, de la misma manera podrá desarrollar sistemas de gestión de responsabilidad social.

4. Comportamiento ético

La RSC deben observar una conducta ética, basada en los valores de honestidad, equidad e integridad. Para su gestión es imprescindible identificar, prevenir y atenuar las posibles consecuencias adversas que se pudieran producir.

5.  Satisfacción de expectativas y necesidades

Toda empresa debe respetar, considerar y responder a los intereses de sus propietarios, accionistas, socios y empleados, así como ante otros individuos o grupos que puedan tener derechos, reclamaciones o intereses específicos a tenerse en cuenta.

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Beneficios de contar con un plan de RSC en la empresa

Contar con un plan de responsabilidad social corporativa conlleva una serie de beneficios para la empresa, aunque ciertas personas puedan llegar a relacionarlo con publicidad destinada a crear una imagen corporativa preocupada con las inquietudes de la sociedad.

Algunos de los beneficios son:

1. Mejora la imagen corporativa y la reputación

La forma de valorar la reputación de una empresa ha dejado de basarse únicamente en el valor económico. Los clientes y candidatos se fijan cada vez más en qué ofrecemos, pero sobre todo, cómo ofrecemos nuestros servicios, es decir, si son medioambiental y socialmente responsables. Por lo tanto, trabajar aplicando una estrategia de RSC, aportará una mejora de la imagen corporativa y un aumento de la reputación de tu empresa.

2. Prevención de situaciones de crisis

Desarrollar la actividad diaria, estableciendo códigos éticos y conductas, siguiendo criterios responsables en el momento de escoger proveedores, considerando el medio ambiente, así como derechos humanos, evita que la empresa adopte o emplee malas prácticas.

De esta forma,  se reducen exponencialmente la probabilidad de recibir denuncias o conflictos que puedan desencadenar una situación de crisis que perjudique a la imagen y reputación de la empresa.

3- Trabajadores más comprometidos

La sociedad actual ha cambiado su forma de valorar el trabajo, donde antes era simplemente un medio para obtener ingresos , ahora es mucho más, y debe congeniar con nuestra forma de vida y de pensar.

Hoy en día, los trabajadores y fundamentalmente  las nuevas generaciones denominadas "Millennials" buscan comodidad, innovación, flexibilidad horaria, transparencia, compromiso social y medioambiental por parte de la empresa para la que van a trabajar.

Es por ello que aplicar una estrategia de RSC, nos permitirá retener talento y diseñar puestos de trabajo que se adapten a la sociedad actual.

4- Aumento de la productividad

Hacer partícipe e implicar de forma activa a los empleados en las estrategias de RSC, actúa directamente, no solo creando y estableciendo un buen ambiente de trabajo en equipo, sino que también aumenta la productividad.

Mejora la motivación y habilidades de los trabajadores, fomentando el sentimiento de pertenencia a la empresa, fortaleciendo a su vez el compromiso e implicación con la misma.

5- Mejora la eficiencia energética

Apostar por una responsabilidad medioambiental, permite a la empresa ahorrar económicamente, al reducir el uso de recursos naturales promoviendo la reutilización y reciclaje.

6- Fidelización y captación de clientes

Cada vez son más los consumidores que confían y admiran a aquellas empresas que desarrollan proyectos sociales, medioambientales, actúan de forma abierta y transparente. Mostrar por tanto inquietudes, preocupaciones responsables  y solidarias, no solo atrae a nuevos talentos comprometidos con ideas innovadoras , si no que fideliza y promueve la captación de nuevos clientes.

La importancia del departamento de RR.HH. a la hora de implantar políticas RSC

Aún no existe una norma de referencia para la implantación de un sistema de RSC que permita ir más allá de normas de gestión ambiental o procedimientos vinculados a la calidad y la gestión productiva.

El modelo de gestión de RSE trata de combinar beneficios y principios empresariales que mejoran las relaciones con los grupos afectados por la actividad empresarial. La base del modelo se encuentra en el conjunto de políticas y buenas prácticas, tanto internas como externas, alineadas a los valores y principios organizacionales. Con estas acciones la empresa mejora su competitividad, sustentabilidad y la calidad de vida de sus empleados.

Etapas para la implementación de la RSC:

• Preparación: Identificar los beneficios que nos puede aportar. Requiere que la gerencia y el personal comprendan lo que se espera de ellos y se comprometan con el proyecto.

• Diagnóstico: La gestión de la RSC parte de un análisis interno de los procesos, sistemas, políticas y prácticas y un análisis externo de los consumidores, proveedores, comunidades y marco jurídico.

• Planificación estratégica y operativa: En este punto definiremos con exactitud las estrategias a seguir y las operaciones que se deben realizar para alcanzar nuestro objetivo.

• Implantación: Su finalidad es que la empresa pueda jerarquizar sus áreas de intervención en función de sus líneas estratégicas, de su impacto y de sus capacidades técnicas y económicas para llevarlas a cabo.

• Comunicación: Busca cambiar el enfoque de comunicación hacia uno centrado en la relación entre la empresa y sus grupos de interés, a través del diálogo.

• Seguimiento y medición: Su finalidad es medir el avance de los procesos y la obtención de resultados para asegurar que el sistema es eficaz y que se alcanzan los objetivos.

• Revisión y mejora: Su propósito es aprender de la experiencia para reducir las debilidades detectadas y potenciar las fortalezas en el siguiente ciclo de gestión.

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