Un nuevo término, cada vez más escuchado en el ámbito laboral, es la "feliciología". Las empresas están buscando constantemente formas de destacar, ser más productivas y retener a sus empleados talentosos. La respuesta a este desafío puede encontrarse en un enfoque que está ganando fuerza y que se basa en la creencia de que empleados felices son empleados más comprometidos y productivos, lo que, a su vez, impulsa el éxito empresarial.
¿Qué es la feliciología?
Es un enfoque que busca fomentar la felicidad y el bienestar de los empleados en el lugar de trabajo.
No se trata solo de mantener a los empleados contentos; es mucho más profundo que eso. Implica crear un ambiente laboral en el que los trabajadores se sientan valorados, motivados y comprometidos con sus tareas y objetivos. Esto puede lograrse a través de una variedad de prácticas y políticas diseñadas para mejorar la calidad de vida en el trabajo.
¿Cómo llevarla a cabo desde RRHH?
Si lo que buscamos es desarrollar el bienestar integral de los individuos en el ámbito profesional como uno de los elementos para la realización personal, enhorabuena.; será un trabajo sostenido y altamente complejo, pero muy gratificante.
Para adoptar la feliciología en Recursos Humanos, las organizaciones pueden considerar lo siguiente:
1. Programas de bienestar.
Ofrecer programas que promuevan la salud física y mental de los empleados.
2. Reconocimiento y recompensas.
Reconocer y recompensar el desempeño sobresaliente.
3. Cultura positiva.
Fomentar una cultura empresarial positiva con comunicación abierta y apoyo mutuo.
4. Desarrollo profesional.
Proporcionar oportunidades de crecimiento y desarrollo.
5. Flexibilidad laboral.
Ofrecer horarios flexibles y opciones de trabajo desde casa.
La receta de la antítesis.
No obstante hay que tener cuidado con las medidas que se implantan y llevan a cabo. Si, por el contrario, caemos en un “mandato feliciólogo” vacío y simplista, estamos creando un camino totalmente opuesto. Esto significa que, por un lado, tenemos poca capacidad de tolerancia a la frustración, y por otro, nos imponemos una idea irreal de felicidad y un exceso de énfasis en las emociones.
Algunos aspectos a cuidar son:
1. Evitar soluciones cosméticas.
Como ofrecer una hora de yoga en el trabajo sin abordar problemas más profundos, no es efectivo. Debemos abordar la satisfacción laboral en su conjunto, desde el ambiente de trabajo hasta el desarrollo profesional.
2. No prometer crecimiento rápido sin formación.
Prometer crecimiento rápido sin proporcionar una capacitación y apoyo adecuados puede llevar a una gran frustración en los empleados. En lugar de ascensos rápidos, es importante enfocarse en el desarrollo de habilidades y el crecimiento real, que requiere tiempo y esfuerzo.
3. No subestimar la importancia de la tolerancia a la frustración.
En un mundo donde la satisfacción instantánea es una expectativa creciente, es crucial que las empresas no descuiden el desarrollo de la tolerancia a la frustración en sus empleados. La vida laboral puede ser desafiante, y la capacidad de superar obstáculos y aprender de los fracasos es esencial para el crecimiento personal y profesional.
En resumen, la felicología en Recursos Humanos, si se aborda de manera inteligente y equilibrada, puede ofrecer numerosos beneficios para las empresas, incluyendo una mayor productividad, retención de empleados y un ambiente de trabajo más positivo.
Sin embargo, para evitar caer en el efecto contrario y convertir la feliciología en un obstáculo en lugar de una solución, es necesario encontrar un equilibrio entre promover la satisfacción en el trabajo y abordar los desafíos y el crecimiento profesional de manera realista.
En lugar de buscar la felicidad instantánea, enfoquémonos en desarrollar la resiliencia, la habilidad para lidiar con la frustración y el crecimiento sostenible. Al hacerlo, no solo construiremos equipos más felices, sino también más exitosos y duraderos en el competitivo mundo empresarial.